El Código Penal dedica una amplia regulación a los delitos contra la salud pública. Estos delitos engloban todos aquellos delitos que de forma general ponen en riesgo la salud de una población.
Los delitos contra la salud pública son todos aquellos que comprometen la salud colectiva y son perjudiciales para el bienestar general. Los delitos contra la salud pública cuentan con una serie de características:
Delitos de peligro abstracto: Son conductas que no necesitan causar un daño específico a alguien, pero que, al realizarse, generan un riesgo general para la salud de muchas personas o la sociedad en conjunto.
Delitos de mera actividad: No importa si al final sucede un daño concreto; lo que importa es que la acción por sí sola ya pone en peligro la salud pública.
Dolosos: La mayoría de estos delitos se cometen de forma dolosa, es decir, con intención de realizarlos. Sin embargo, también es posible que algunos se cometan por imprudencia.
Comunes: Normalmente, cualquiera puede cometer este tipo de delitos, por eso se llaman comunes. Pero en algunos casos, se consideran especiales porque solo pueden ser cometidos por personas con un rol o condición específica (por ejemplo, un médico que incumple una normativa sanitaria).
En el ámbito de los delitos contra la salud pública existen algunos delitos relacionados con el comercio. Este es el caso de la elaboración de sustancias nocivas para la salud así como su suministro o comercialización. En este caso puede existir que no haya autorización o que exista dicha autorización, pero no cumpla con las formalidades legales. La distribución y difusión ante menores para promover el consumo de productos o sustancias cuyo uso puede suponer un riesgo para la salud de las personas, así como la modificación de componentes de medicamentos de manera peligrosa o la inclusión de aditivos no autorizados en los alimentos también están considerados como delitos.
La falsificación de documentos relacionados con el suministro de medicamentos, así como el uso de medicamentos para el dopaje. Estos son solo algunos de los ejemplos de delitos considerados contra la salud pública.
Por otro lado, todos los delitos relacionados con el tráfico de drogas son considerados delitos contra la salud pública.
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La pena y la multa que se interpone tras un delito contra la salud pública depende del delito cometido. La pena de prisión puede ser de entre 6 meses a 3 años y la multa de 6 a 12 meses.
Según el artículo 372 del Código Penal cuando el autor del delito sea empresario, facultativo, funcionario público, docente o trabajador social en el ejercicio de su cargo junto a la pena se le incluye una inhabilitación especial para el empleo de 3 a 10 años dependiendo del delito cometido. En cambio si es un agente de la autoridad la inhabilitación absoluta es de 10 a 20 años.